LA REFUNDACIÓN ABANDONA A SUS ACTIVISTAS EN ACERAS
En los 40 mil pesos que, según el IHTT, pagaron los de LIBRE para movilizar a sus activistas a la movilización del finde, quizás olvidaron incluir al grupo de olanchanos que, una vez finalizado el fiestón, dejaron tirados en la capirucha.
Bien dicen que mal paga el Diablo a quien bien le sirve, porque ahí andaba esa humilde gente, sin un peso en la bolsa, buscando algún jalón que los devolviera a su pueblo luego de haberse asoleado y desgalillado en la movilización.
Una movilización a la que asistieron bien casaqueados, encaramándose confiados a los buses, con la promesa de recibir a cambio un trozo de cielo y sin imaginar que acabarían amontonados en una acera, durmiendo sobre cartones sí que nadie respondiera a su llamado de auxilio.
Un llamado que bueno hubiese sido hacer llegar a sus paisanos que gobiernan cómodamente desde Casa Presidencial, instalados en sus cuartos alfombrados, como muestra clara del cinismo que hoy y siempre ha movido los hilos de una clase política que alza la bandera del cinismo allá por donde va.