EDUARDO MARTELL ARRASTRA SU DIGNIDAD

A Eduardito Martell cada vez le queda menos dignidad para pisotearla, y para colmo, decidió malgastarla apoyando a precandidaturas estériles y pajizas como la de Luis Zelaya en el Partido Liberal, al que no se le arrastró más de lo que le hubiese gustado, simple y sencillamente porque no encontró más suelo para hacerlo.

Porque se ha convertido él en un ferviente defensor de la causa troyana que promulga Luis con su movimiento “Recuperar Honduras”, que según muchos en el partido y fuera de él, no es más que la causa de la refundación nacional a la que se plegó el precandidato hace ya algunos años.

Así lo demostró Eduardito en X, donde si se hubiese esforzado una milésima más, habría puesto celosa a la mismísima mujer de su líder, porque las palabras que le dedicó están solo al alcance de un enamorado, o de un vasallo que aceptó ya su rol en el mundo, o al menos en el mundillo colorado.

“Puedo confirmar que Luis Zelaya está renunciando… Renunciando a ser indolente, a cruzarse de brazos, a no hacer nada, al confort y comodidad de su vida para ser presidente, Recuperar Honduras y sacar adelante nuestro pueblo. La campaña sucia no nos detiene”, puso en X, donde demostró tener la misma gracia que una piedra.

Su pegazón con Luis, dicho sea de paso, da forma a la alianza de los resentidos en el bando colorado, pues el luisismo aglutina a todos aquellos que comparten su tirria con el oficialismo representado por el yanismo, y a la vez el amor no reconocido que profesan por el castrozelayismo. Que Dios los agarres confesados