MINISTERIO PÚBLICO, “INSTRUMENTO DE PERSECUCIÓN”
A Jorge Cálix el Ministerio Público sigue sin hacérsela buena, porque demasiado color se ha dado ya echándole la vaca de la justicia solo a los que están del otro lado de la línea que les dictan desde Casa de Gobierno, a tal punto que lo considera no un ente acusador sino un “instrumento de persecución política”.
Y para reforzar su argumento hasta se tomó la molestia de presentarse en público este lunes portando un enorme cartel con el lema “#YElCuñadoPaCuando”, escrito así, con hashtag, para remarcar el que es ya un clamor popular para que la Fiscalía aplique el mismo rasero con Carlón, pues sus vínculos con el narcotráfico están ahí, a la vista de medio mundo.
“Si aquí estuviéramos hablando de un requerimiento fiscal contra el cuñado y verlo en Támara así como enviaron a los tres generales, yo diría la cosa está pareja, pero no es así”, cuestionó, aludiendo al encarcelamiento de Romeo, Venancio y Carlos, a quienes la justicia refundacional metió al mamo en Támara por algo que supuestamente hicieron 16 años atrás.
Una instrumentalización, según Cálix, que sin embargo tiene otra finalidad aún más perversa: la de desviar la atención por las respuestas recibidas de los senadores gringos tras amenazar la presi Xiomara con echarlos de Palmerola si a Trump se le ocurre deportar masivamente a los catrachos desde el norte cuando asuma el control de la guayaba de la Casa Blanca.
“El gobierno creó este distractor con la captura del general Romeo Vásquez”, mencionó, dejando entrever que todo se trata de una reacción por la temblequera que les agarró cuando desde el norte los senadores Mike Lee y Ted Cruz respondieron con la posibilidad de clavarle un impuesto a las remesas si la refundación sigue con sus acomplejados planes.