LA PRESI NO ESTARÁ PRESENTE
Tal parece ser que la comandanta Xiomara Castro se hará la de a peso para no asistir en cuerpo, pero sí en alma, mente y corazón, a la toma de posesión de su alero, el narco Nicolás Maduro, el 10 de enero en Caracas, tras haberse impuesto a la brava en las urnas con un monumental fraude que fue avalado precisamente por ella y otros zurdos afines de la región.
Quien reveló la primicia fue uno de sus perritos falderos más fieles, el vicecanciller Gerardo Torres, quien adelantó que el gobierno refundidor únicamente enviará a “representantes” en lugar de la presi, pese a que la buena sintonía entre ella y el narcodictador siempre ha sido evidente e indisimulable.
No se sabe aún quiénes serán los emisarios que acudirán en su representación, si es que lo dicho por Gerardito resulta ser cierto, aunque lo más probable es que él mismo sea uno de ellos, pues ya se sabe el encule que siempre ha demostrado a favor de la causa venezolana, a la que alaba cada vez que puede por las supuestas bondades que ofrece a su pueblo.
Un pueblo que, sin embargo, huye en manada de allá, encontrándose en el camino y uniéndose a los que huyen en manada también de acá, donde la realidad es triste y penosamente similar, con un denominador común que apunta para su clase gobernante, que es triste y penosamente igualita.