ADVIERTE LA MANDATARIA

Tarde, pero lo hizo. Dos días después de que el hospital Leonardo Martínez, en San Peter, comenzara a sacar billete a las pacientes que llegaron ahí a parir, la comandanta Xiomara Castro tuvo que ponerse seria y desde X avisó a todo aquel funcionario que si lo denuncian y le comprueban que anda con esas mañosadas, no le va a temblar el pulso para mandarlo a chapalear.

Según la presi, ese pago, si el paciente así lo quiere, debe ser siempre y en todo momento voluntario y no en forma de “contribución” como lo quiere hacer ver Gledys Gutiérrez, la directora del hospital, pues recordó ella que “en mi plan de gobierno se prometió no cobrar a las personas que requieren servicios de salud del Estado” y esa intención no ha cambiado.

Si bien es cierto no mencionó la mandataria ningún caso específico, todos los ojos apuntaron de inmediato para el hospital sampedrano, pues es el que levantó polvo los últimos días cuando anunció los cobros, efectivos a partir del día 23 y con trancazos de hasta 1,500 pesos para las doñas a las que les toque cesárea, así como otros menores para otro tipo de atenciones.

En cualquier caso, los trancazos deberán parar, por orden presidencial, que delegó en su prima, la ministra Carla Paredes, el encarguito de arrizar a los funcionarios a los que se les compruebe cualquier implicación; aunque todo ello sin abordar el problema de fondo, que no es otro que el centro hospitalario vive sacando la lengua desde que pasó a manos de la Sesal tras quitárselo a la fundación que antes era la que se hacía cargo.