OBISPOS PIDEN A POLÍTICOS DEJAR EL EGOÍSMO…
Como si se tratara de un milagro decembrino, los obispos de Honduras aprovecharon su mensaje de Navidad para recordarle a los políticos que, aunque el egoísmo sea parte del manual de todo buen funcionario, quizás podrían intentar dejarlo por un rato.
“Sabemos que situaciones de extrema pobreza propician las migraciones y con ellas las rupturas del núcleo familiar”, dijo monseñor José Antonio Canales, quien recuerda que la pobreza es un tema delicado, sobre todo cuando los políticos están ocupados en otras prioridades, como decorar sus oficinas y llenar sus mesas con banquetes financiados por el pueblo.
En un año electoral que ya promete más promesas incumplidas que luces navideñas, la Conferencia Episcopal sugirió algo que podría sonar revolucionario: dejar de pensar en los intereses personales, de grupo o de partido. “Al acercarse un año electoral, debemos trabajar unidos para abandonar la búsqueda egoísta del bien personal”, propuso monseñor Canales. Una idea tan innovadora que seguro quedará archivada junto con las reformas nunca aprobadas.
Y como la Navidad no sería lo mismo sin un mensaje esperanzador, el texto cerró con un llamado a celebrar no solo el recuerdo del nacimiento de Cristo, sino también a actualizar su espíritu en una Honduras “tan necesitada del espíritu de Cristo”. Traducción: basta de discursos, es hora de que el pesebre de la política hondureña deje de estar lleno de burros y bueyes mirando al techo, y comience a llenarse de verdaderos pastores del bien común.
Eso sí, el mensaje final deseó un “año jubilar 2025 colmado de bendiciones”. Porque si algo caracteriza a Honduras es el optimismo, aunque haya más posibilidades de encontrar un reno volador en Choluteca que un político trabajando por el bien común.