MP ANUNCIA VIAJECITO A NY ¿INVESTIGACIÓN O TOUR DE COMPRAS?”
En un sorpresivo giro de los acontecimientos, el flamante Fiscal General de Honduras, Johel Zelaya, decidió tomar cartas en el asunto tras el escándalo desatado por el juicio contra el exdiputado Midence Oquelí Martínez Turcios en la Corte del Distrito Sur de Nueva York.
Zelaya, en un gesto que mezcla patriotismo con diplomacia de exportación, anunció en su cuenta de X que ha “ordenado a un equipo de fiscales viajar a Estados Unidos” para recopilar información sobre los políticos hondureños mencionados en el caso.
Sí, leyeron bien: ¡un equipo de fiscales! No uno, no dos, sino un equipo. ¿Quién necesita al FBI cuando Honduras puede enviar a sus mejores mentes legales? La misión parece clara: descubrir si los políticos catrachos mencionados tienen más relación con el caso que con los menús de los restaurantes neoyorquinos.
Zelaya, quien claramente es un apasionado del thriller político, fue enfático: “No debemos permitir que el dinero proveniente de actividades ilícitas sea utilizado para comprar conciencias, al punto de influir en la elección de altos cargos en el país.” Una frase tan contundente que probablemente dejó a más de un político local ajustándose el cuello de la camisa, nerviosos. Todos menos los del familión porque no solo comparten el mismo apellido, sino otros intereses, bueno eso es lo que dicen algunas malas lenguas.
En círculos políticos, se comenta que algunos de los mencionados en el juicio ya están preparando sus mejores argumentos, entre ellos: “No estaba en Nueva York, estaba viendo Netflix” o “Eso es un caso de homonimia, señor juez”.
El anuncio de Zelaya también ha generado preguntas en redes sociales: ¿El equipo viajará en clase económica o aprovechará millas acumuladas de otros casos? ¿Tendrán tiempo para una visita a Times Square antes de empezar la investigación? ¿Habrá un capítulo extra de este drama donde se revelen nombres y apellidos?
Por ahora, lo único seguro es que las audiencias en Nueva York han encendido más alarmas que las sirenas de ambulancia en el centro de Tegucigalpa.