CONSECUENCIAS DE LA DEVALUACIÓN
El comisionado de la CREE, Leonardo Deras, ha dado una parte de tranquilidad y un poco de resignación al pueblo hondureño al afirmar que, aunque el lempira sigue perdiendo la batalla contra el dólar, los usuarios de energía eléctrica subsidiados podrán dormir tranquilos… al menos hasta fin de año.
Estamos viendo un descenso de la moneda que, obviamente, va a incidir en el pliego tarifario. Pero tranquilos, que los subsidios mágicos del gobierno están aquí para absorber ese golpe, declaró Deras, como quien trata de convencer al público de que el barco no se está hundiendo, solo inclinándose un poquito.
La estrategia parece clara: en lugar de abordar los problemas estructurales, como la ineficiencia de la ENEE o la dependencia de contratos caros, la solución es seguir tirando dinero en subsidios, mientras el gobierno cruza los dedos para que el dólar no decida subir más rápido. de lo que baja el sol.
Mientras tanto, la población que no goza de subsidios solo puede esperar que la “eficiencia en la contratación de energía” llegue antes que el próximo aumento tarifario. Claro, porque si algo caracteriza a la administración pública hondureña, es su impecable eficiencia y planeación, ¿verdad?