JUEGAN CON LA NECESIDAD DE LA GENTE
Se tiene que ser muy ruin y despreciable para jugar con el futuro de la niñez solo para asegurarse unos votos, y en esas el precandidato de la refundición en Ilama, Santa Bárbara, lleva todas las de ganar. Resulta que con todo el cinismo del mundo reconoció el cretino que las becas Proasol que consigue para aquel pueblo son solo para los hijos de aquellas familias afines a la refundación.
Es decir, vale chancleta que un cipote vaya de cien en cien en sus calificaciones, porque al final de cuentas Yonathan Fernández, que es como se llama el majadero, es quien decide a quién sí y a quién no dárselas, tal y como él mismo reconoció, algo que por cierto da una idea de la calaña de ser humano que es: “Se las damos a la gente que está directamente con nosotros” dijo.
Y así, de esa manera tan burda y despreciable aspira él a convertirse en alcalde, aunque si fuese éste un país medianamente decente ya lo habría mandado a procesar y a bajárselo de la contienda electoral, para que aprendan los otros que al igual que él juegan con lo más sangrado de un pueblo: su niñez.
Quizás lo único bueno de semejante canallada es que ya anda rebotando de arriba para abajo en las redes, de donde algo bueno tendrá que salir. ¿Y la condena desde el oficialismo? Muy bien, gracias. Porque pese a los pesares, lo más probable es que el cínico Yonathan la acabe librando, pues dicen por ahí que es un inescrupuloso muy afín a Edgardo Casaña.