LA CULPA ES DE TODOS MENOS MÍA

Dijo Héctor Manuel, el primogénito de la parejita presidencial, que la culpa de que los gringos hayan dejado fuera de la Cuenta del Milenio por tercer año consecutivo al gobierno refundidor de sus papis no es culpa de ellos sino de todos los demás, por “crear en el imaginario” que son un gobierno corrupto, amparándose en las evidencias de que son un gobierno corrupto.

A lo mejor creyó Héctor que este año sí se les haría realidad el milagrito de volver a acceder a ese billetillo, pues han dedicado incontables esfuerzos en hacer lobby en el imperio y enviar allá emisarios cada dos por tres, para hacerse sus respectivas selfies y demostrar a los evaluadores que ellos son ‘Team Tío Sam’.

Y es que como buen refundidor que es, fue incapaz de asumir sus propios planches, ya que siempre es más fácil echarle la culpa a los demás, pues según él la razón para no haber sido elegibles fue de la oposición, que es la que vota en las encuestas de percepción de la corrupción que les hacen los emisarios gringos encargados de la Cuenta.

Porque según el “asesor” presidencial, cuando estos votan en la encuesta lo hacen “con sesgo político” que luego influye en los indicadores ya que tiene “un gran peso” que, al final de cuentas, es lo que vale para aprobar o salir aplazado, tal y como ha sido el caso. Aunque bueno fuera decirle que los indicadores reprobados fueron once de los veinte que son. Por algo será.

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