REDONDO, OBSERVADOR DE DUDOSA REPUTACIÓN

Que Dios se apiade de los gringos, pues el día de las elecciones les llegará por allá una comitiva de observadores congresistas catrachos encabezada por Luis Redondo, que, pese a no ser capaz siquiera de transparentar los procesos en el Legislativo, llegará a la gran nación del norte con ínfulas de veedor en un proceso electoral histórico.

El notición lo anunció el propio Congreso hondureño a través de sus redes sociales, y lo confirmó despuecito la Fundación Internacional para Sistemas Electorales, que a través de su director Máximo Zaldívar Calderón dijeron sentirse “satisfechos”, dando una pista inequívoca de no saber dónde ni con quién se están metiendo.

Aun así, dijo Zaldívar que la visita de los observadores de dudosa reputación será “sumamente importante”, pues “demuestra que además de tener interés en una experiencia de procesos electorales comparativos, tienen también interés en lo que viene después y cuáles serán esas relaciones a futuro, independientemente del resultado del día martes”. Pobrecito.

Lo que no se especificó aún es si aprovechará Redondo su visita para atender la citatoria de la justicia gringa respecto a la demanda por alimentos que le clavó su exnovia, con quien procreó una hija de la que no quiere hacerse cargo. Y es que, pese a la insistencia de la cipota, el conserje de Mel se ha desentendido cínicamente del asunto, lo cual da a entender lo muy en serio que se toma sus responsabilidades.