TEMOR A “APLAZANCINA” EN SISTEMA EDUCATIVO

La decisión refundacional de reducir a una única vez las opciones de recuperación de materias por parte del estudiantado en las escuelas y colegios públicos tiene en vilo a los padres y madres de familia de los alumnos más pachorrudos, pues temen que la aplazancina será de Padre y Señor mío, por lo que andan pidiendo alternativas para medio disimular el bombazo que se avecina.

Así lo reflejó El Heraldo en su edición de este martes, donde algunos progenitores andan con el corazón en un puño, conscientes de que sus vástagos no son precisamente unas eminencias, y la eliminación de la tradicional “escuelita” de enero, que servía a muchos alumnos para salvarse de la quema, provocará severos atascos en los egresos de los cipotes.

“Esto me hace sentir mal por la falta de oportunidades, pero espero que sea un aprendizaje para mi hijo y los demás”, dijo al respecto Karen Zelaya, una madre de familia que pide a las autoridades, encabezadas por el ministro Daniel Sponda, una opción alternativa, tal y como coincide Carlos Salgado, otro padre, quien considera que “sería bueno que buscaran opciones para esta vez podernos ayudar con nuestros hijos”.

Pero cualquier cosa que tenga que ver con recular con la medida sería dar pie a la mediocridad de los aplazados, que hasta ahora pasaban por la escuela, pero no la escuela por ellos. Algo con lo que está de acuerdo, sin embargo, Eulogio Chávez, expresidente del Copemh: “No creo que aumente el índice de reprobados, porque los profesores ya les dan los temas a los estudiantes y eso facilita el proceso”.

Pero por mucho pataleo que les agarre, Sponda dice estar decidido a hacer que la medida perdure, subrayando que todo forma parte de una reforma integral del sistema y un retorno a la regularidad académica, para combatir la mediocridad académica. Y razón no le falta, por una vez en su vida.