Medievalismo en la escuela hondureña
Inconcebible e imperdonable en la era de la tecnología en las escuelas hondureñas no hay ni luz, ni agua potable. Encima, de las pocas aguas negras que hay muchas están a punto de caerse. Cualquiera podría pensar que es una clase práctica de historia medieval, pero es una realidad cotidiana de la Honduras actual.
El coordinador del Observatorio de la Educación de la Universidad Nacional Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), Mario Alas, dio datos que siguen dando pena. Estos datos indican que alrededor de uno de cada cinco centros educativos no tienen agua potable, el 43 % no tienen acceso a energía eléctrica un 31 % no tienen alcantarillado ni ningún servicio de tratamiento de aguas negras. Por si fuera poco, los niños siguen hacinados en la modalidad unidocente y bidocente. En definitiva, los niños hondureños se hacinan en cenáculos oscuros al más puro estilo del oscurantismo medieval, y no es una clase práctica.