BEATRIZ VALLE JURA AMOR ETERNO A LOS COLORADOS

Por fin Beatriz Valle volvió al redil tras ser juramentada por el partido colorado tras su salida de ese instituto político en 2009, por el golpe de Estado. En un acto con toda la parafernalia, juró amor eterno a la bandera rojo-blanco-rojo y se convirtió así en una colorada de pies a cabeza

“Prometo ser fiel a la patria y al Partido Liberal de Honduras” dijo, con la diestra en alto, repitiendo el juramento que le dictó Yani Benjamín, el capataz del partido, quien reconoció el golpe de efecto que supone el fichaje de una de las gallinas que más cacarean en el corral político catracho.

Una vez consumado el asunto, la ex embajadora en Canadá saltará de un solo a las filas del calixtismo, donde el precandidato Jorge la estaba esperando como agua de mayo, consciente de los quilates que gana su movimiento político con la incorporación de la aguerrida diputada, quien llegó vestida elegantemente de rojo y blanco para la ocasión.

“Voy a apoyar al partido, empujarlo y convertirlo en el más grande de Honduras, que era lo que era antes del golpe de Estado” dijo, visiblemente contenta, pues su salida de Libertad y Refundición no fue precisamente amistosa a razón de las verdades que les cantó a sus caudillos en repetidas ocasiones.

Prometió así Beatriz seguir “luchando por el desarrollo del país”, solo que, ahora vestida con otros colores, y aseguró que no llegó para dividir sino “para aportar”, pues desde un principio aceptó “con mucho gusto” la invitación colorada de sumarse a sus filas.