TRABAJAMOS PARA SER POBRES

Andan desatados los incrementos de precios en la canasta básica catracha, donde al menos 15 productos andan ya costando casi un ojo de la cara tras el descarado aumento que sufrieron en apenas una semana, haciendo que a la catrachada básicamente le toque trabajar para seguir siendo pobre, pues no hay manera de salir adelante.

De acuerdo al último recuento de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica (Adecabah), donde más se siente el trancazo es en l maíz, los frijoles y el arroz, que son algo así como la vieja confiable de la cocina catracha. Y es que la media de maíz subió de 25 a 26 pesos; la de frijol rosado ahora se cotiza en 110 o 120 pesos, dependiendo de a dónde vaya; y la libra de arroz que pasó de costar 13 a ponerse en los 14 pesos actuales.

Toda una grosería que sin duda hace más grande el hoyo del bolsillo de la población catracha en condición de extrema pobreza, que ahora mismo anda en más o menos el 64.1% de la población; lo cual representa algo así como a 5 millones y medio de criaturas.

Pero agárrese, porque la lista continúa. Según Adalid Irías, presidente de esa asociación de monitoreo de precios, la bolsa de café de 16 bolsitas, que la semana pasada costaba entre 78 y 80 lempiras, “en este momento se cotiza entre los 90 y los 94 lempiras”.

Y así sucesivamente hasta llegar a las verduras, donde la coliflor y la lechuga se pusieron a valer 10 pesos más; y la papa, que ahora vale 25 pesos después de costar 22; el apio, que subió 3 pesos; la cebolla amarilla, que pasó de los 20 a los 22 pesos; y la roja, que se fue hasta los 35 después de costar 5 pesos menos.

Y todo ello sin que nadie diga ni pío entre las incompetentes autoridades del gobierno refundidor, que no hace mucho sacaron a pasear a los medios de comunicación a su ministro Fredis Cerrato, quien aseguró que la libra de pollo anda valiendo 7 pesos. Es decir, viven con la nariz ensartada en su burbuja y de ahí nadie los saca.